Mónica siempre nos ha sorprendido no solo por llevar el grabado, una técnica tradicional, a los procesos del arte contemporáneo, sino también por su insistencia en alzar la voz y señalar preocupaciones actuales: las fuentes de agua de la ciudad, la tala de árboles, la contaminación de las costas, los territorios, los feminicidios, nuestros desaparecidos, entre muchas otras.

Es miembro del Sistema Nacional de Creadores de Arte 2018 y 2021 y ha obtenido Premio único de adquisición en la Bienal Nacional de Grabado y Pintura Alfredo Zalce 2022 y Premio Nacional de Grabado José Guadalupe Posada (2011), entre muchos otros.

Remedios grabados para escuchar es una serie de estampas tiradas en un número de 8 ejemplares impresas en papel Hahnemühle de 350 gr en el Jacal Gráfico, Puebla.